Cómo elegir el coche de empresa ideal: claves para tomar una buena decisión

La compra de un coche es para la mayoría de los españoles una de las decisiones económicas más importantes, junto con la adquisición de una vivienda, que tomarán en su vida. Y cuando se trata de un vehículo de empresa, es algo incluso más importante, puesto que puede convertirse en una inversión en sí misma. 

La posibilidad de desgravar parte del coste o convertirlo en pago en especie hace que sea una opción extremadamente popular para muchos autónomos y pymes. Y dentro del enorme abanico de posibilidades que abre el mercado, hay algunas que pueden resultar especialmente adecuadas por su versatilidad.

Por sus capacidades, planteamiento técnico y la estrategia de renting para empresas y autónomos que brinda, Dacia Bigster tiene todo lo necesario para convertirse en uno de los coches de empresa más valorados por los profesionales. Y es que, con su planteamiento, aborda directamente las principales cuestiones que todo empresario debe plantearse a la hora de analizar su próximo vehículo...

Así como la elección de un vehículo de uso particular deja cierto hueco a los gustos personales, permitiendo cierta laxitud, la calculadora toma las riendas cuando se trata de adquirir un coche de empresa. Por ello es fundamental conocer el coste total de propiedad, que es otra forma de decir el dinero que el conductor se va a gastar desde el momento de firmar el contrato de venta a cuando llegue el día en que ese coche cambiará de manos, sea por reventa, devolución o achatarramiento.

No todos los gastos asociados a la vida de un coche de empresa se pueden prever con la claridad suficiente como para hacer un cálculo preciso, pero sí los principales. Por ejemplo, el precio, los gastos de financiación, los impuestos locales y nacionales, los gastos de mantenimiento, el coste del seguro y el consumo del combustible, estimable en base a los kilómetros realizados. Si se descuenta el precio de reventa, obtenemos el coste total de propiedad.

Con su propuesta de precio ajustado (hay que ir a rivales mucho más caros para encontrar el mismo nivel de confort, habitabilidad o un maletero con tanta capacidad), financiación asequible y mecánicas extremadamente eficientes (4,6 litros a los 100 km en ciclo mixto WLTP usando la variante Hybrid 155), Dacia Bigster parte con una considerable ventaja.

Otro aspecto que ha hecho de Dacia una de las marcas favoritas entre las pymes es su garantía Dacia Zen. Gracias a ella, es posible ampliar la garantía legal de tres años hasta siete años o 150.000 km, lo que llegue antes, con solo realizar el mantenimiento en un taller oficial de la marca. Basta con concertar una cita en cualquier Dacia Service para salir con un año de garantía adicional. Con Dacia Zen, las pymes tienen la garantía de seguridad que necesitan.

Aunque puede parecer una cuestión menor, las zonas de bajas emisiones o ZBE van a convertirse en un pequeño gran quebradero de cabeza para muchas empresas. Muchas ciudades tienen ya planes de ampliación para estas zonas de acceso restringido, y querer ahorrar más de la cuenta con un coche "que llega" para dar servicio a clientes fuera de una ZBE puede tener consecuencias imprevistas cuando se expandan los límites o se endurezcan las normas, impidiendo el acceso de vehículos de empresa antiguos anteriormente permitidos.

En este aspecto, Dacia Bigster cuenta en todas sus versiones con el distintivo ECO de la DGT al incluir hibridación ligera o completa, por lo que puede acceder a la mayoría de las ZBE de España. Y no solo eso, sino que se puede beneficiar de los precios especiales en el aparcamiento con los que algunas ciudades recompensan la adquisición de un vehículo menos contaminante.

Particularmente en el caso de autónomos y empresas, la posibilidad de deducir el IVA y otros gastos del vehículo hace que la adquisición de un coche de empresa sea extremadamente atractiva. A esto se suma el hecho de que hay iniciativas pensadas para rejuvenecer el parque móvil, con ventajas fiscales y ayudas por la compra de vehículos nuevos.

Así, además de los planes a nivel nacional que van apareciendo, como el Plan MOVES III 2025, se suman otros de carácter autonómico e incluso municipal. En Madrid, por ejemplo, el Plan Mueve Madrid contempla ayudas de hasta 2.000 euros por el achatarramiento de un vehículo antiguo y la compra de uno nuevo menos contaminante.

Dacia, consciente de la importancia de este tipo de estrategias, ha decidido ir ahora más lejos, y ofrecerá de 500 a 1.000 euros adicionales por cada matriculación bonificada mediante el Plan Mueve Madrid, elevando la cuantía final por vehículo.

Puesto que en ocasiones informarse de todas las ayudas disponibles puede ser laborioso y complejo, lo mejor es acudir al concesionario Dacia más próximo y dejarse asesorar.

Si bien la compra parece que es siempre la opción por defecto a la hora de considerar un coche de empresa, el renting (préstamo con seguro incluido) y el leasing (alquiler con opción de compra) son posibilidades perfectamente válidas que permiten disfrutar de algunos de los beneficios fiscales que habitualmente se pueden encontrar en la adquisición directa de un vehículo.

Una ventaja de los planes de renting y leasing es su temporalidad. Dado que se van renovando, su impacto económico es menor si en un momento dado la empresa ya no necesita ese coche. Se han convertido, así, en opciones extraordinarias para pymes que deben gestionar flotas. En este sentido, Dacia ofrece diversas opciones de financiación para satisfacer todo tipo de necesidades.

Si bien un trabajador autónomo suele estar muy familiarizado con las exigencias materiales de su trabajo (herramientas, producto, calidad y tipo de las vías a recorrer...), en ocasiones, las pymes pueden errar a la hora de escoger un coche de empresa, volcándose en vehículos muy llamativos o muy económicos que terminan dando un rendimiento insuficiente.

Por este motivo es importante considerar el trabajo de los comerciales, por ejemplo. ¿Debe transportar productos o muestras de gran tamaño que a duras penas cabrán en un subcompacto? ¿Se deben realizar trayectos que un vehículo de tipo urbano no puede acometer de forma continuada por comodidad o potencia? ¿Hay necesidad de introducir herramientas que puedan dañar tapicerías delicadas? Si es así, en su versión Extreme, se incluye tanto una tapicería fácilmente lavable como alfombrillas de caucho (incluida la del maletero) para limpiar fácilmente.

Con su estricta concepción C-SUV, Dacia Bigster tiene la presencia necesaria para representar adecuadamente a cualquier empresa, un maletero de 702 litros (667 norma VDA) donde caben bultos mucho más que considerables, y la potencia necesaria en cualquiera de sus mecánicas para abordar la carretera con el aplomo de cualquier sedán.

A la hora de escoger un coche de empresa, hay pocos modelos que presuman de una propuesta de valor como la de Dacia Bigster. Espacioso incluso para su tamaño, dotado con motores de última generación, con una garantía líder y disponible en modalidades de tenencia temporal, cumple la mayoría de los requisitos de las empresas antes siquiera de considerar sus necesidades más particulares, y todo ello con un empaque que casi lo acerca a la representación.

Sin duda, un modelo con el que evitar muchos de los errores que cometen pymes y autónomos cuando deciden optar por adquirir un vehículo para su uso laboral y que, cuando llegue el momento de cambiar, contará con un valor residual más elevado que el de otras marcas.

Sobre el autor

Alberto Ballestín

periodista especializado en motor